Hoy voy a ver por fin algo que he visto muchas veces en fotos pero que tenía muchas ganas de estar delante: Der Rheinfall, es decir, la impresionante cascada del Rhin. ¡La más grande y caudalosa de toda Europa!
Para eso voy con mis padres a Schaffhausen, donde mi hermano pequeño ha estado vivieno hace poco con su familia, a cinco minutos andando hasta la cascada. Y es que el Rhin hace aquí de frontera natural entre los cantones de Schaffhausen y Zürich.
Para eso voy con mis padres a Schaffhausen, donde mi hermano pequeño ha estado vivieno hace poco con su familia, a cinco minutos andando hasta la cascada. Y es que el Rhin hace aquí de frontera natural entre los cantones de Schaffhausen y Zürich.
Recorrido – Der Rheinfall y el Munot de Schaffhausen
Mostra Schaffhausen und der Rheinfall en un mapa més gran
Mostra Schaffhausen und der Rheinfall en un mapa més gran
Pero lo primero es lo primero. Hoy es domingo y nosotros somos católicos. Así que vamos a Misa a una hermosa iglesia gótica de Schaffhausen, tal y como muestran las imágenes. Pero lo que más me llama la atención es lo que hay detras de la Pila Bautismal y el Cirio Pascual. Sí, exacto, se trata de unas mesitas y sillas pequeñas y unos cajones con juegos al fondo para que se entretengan los más pequeños mientras los padres oyen Misa. Pero bueno, ¿es que en aquí en Suiza ni siquiera los más pequeños hacen ruido? Pues perdonad, pero me cuesta imaginarme una pequeña guardería en cualquiera de nuestras iglesias. Y sin los padres! Vaya, que me estoy imaginando la escandalera y la mala cara del cura.
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Pues bien cada una de estas partes merece una atención especial.
Las siguientes fotos muestran con más detalle el lado derecho donde se puede apreciar la magnitud de la cantidad de agua que lleva el río y la fuerza que ésta puede desembocar.
La respuesta está en la gran balsa de la izquierda, desde donde salen barcazas que intentan aproximarse a la catarata desde todos los lados hasta que la fuerza del agua vence a la de los motores y entonces las barcas giran hacia atrás en un espectacular remolino que provoca los gritos de admiración de la gente que va en ellas. Pero hay un camino. Justo una lengua de agua que no lleva esa fuerza en frente de la gran roca permite acceder a las barcas y atracar en la base de la roca para descargar a la gente. Sólo así se puede acceder.
Las siguientes fotos muestran algunos de los accesos que pude visitar. Estar en el saliente de hormigón justo delante de la cascada y un poco por encima del agua que cae es impresionante de verdad.
Dentro de este recinto hay un museo histórico sobre el Rheinfall. Desde el siglo XVII ya era este sitio un lugar turístico para las clases pudientes de toda Europa. Goethe, por ejemplo, estuvo aquí de vacaciones tres veces. En el museo también hay una muestra de tapicería para deleite de mi padre, tapicero de profesión.
Y así llegamos al final del día. Me despido de la familia de mi hermano y me vuelvo a casa de mis padres. De ellos me despediré mañana para empezar mi pequeño periplo por Alemania.